Se acerca la Navidad y muchos de nosotros ya estamos pensando en los regalos que tenemos que hacer. La estadística dice que de media, las familias nos gastamos más de 200 euros en regalos y que gran parte de este dinero están destinados a los juguetes de los más pequeños. No son pocos los expertos que hablan del fenómeno de los niños «hiperregalados»: aquellos que reciben un gran número de regalos y acaban por no fijarse en ninguno de ellos. A los más grandes nos pasa a menudo lo mismo. Es por eso que queremos plantearos una serie de regalos alternativos para un público de todas las edades. Son propuestas diferentes, que huyen del consumismo y en su mayoría, pensadas para vivirlas en familia. ¿Vamos?
- Una suscripción a una revista. Es un regalo fantástico para padres y madres preocupados por el desarrollo de sus hijos. En esta ocasión os recomendamos una suscripción a la revista «Hacer familia», con temas tan interesantes como el coeficiente emocional de los niños o cómo estimular las capacidades de los niños. Podéis suscribiros a través de este enlace y la recibiréis en casa, aunque si lo preferís, también podéis optar por la edición digital.
- Un viaje en globo. Niños y adultos hemos soñado alguna vez con viajar en globo. Hay diferentes empresas que ofrecen vuelos en familia, hasta un máximo de 8 personas.
- Un talonario de experiencias sencillas, pero placenteras. Las vacaciones de Navidad son un buen momento para disfrutar de tiempo en familia. El frío invita a quedarse en casa, así que os proponemos confeccionar un talonario de experiencias: una merienda de chocolate caliente con coca, una noche de acampada y películas en el comedor, unas deliciosas galletas caseras de Navidad, un baño de burbujas y masaje relajante, un taller de marionetas hechas con calcetines…
- Una colección de libros. En todos los paquetes de navidad tendría que haber, al menos, un libro. Este también es un buen momento para regalar propuestas relacionadas con la Navidad y las tradiciones.
- Un día en el museo. Una visita al museo puede ser interesante para trabajar diferentes temas. Haced una propuesta de todos aquellos museos (o exposiciones) que todavía no habéis visitado y dejar que los pequeños elijan. Podéis relacionar esta visita con alguno de los libros que les regaléis.
- Adoptar un animalito. La Navidad es uno de aquellos momentos en los que muchas personas se encaprichan con un animalito. Es normal que los más pequeños sientan curiosidad por los animales y, de hecho, tener uno en casa es una oportunidad excelente para educar el cuidado de otro ser vivo, así como en la responsabilidad y el respeto. Es necesario también no caer en la trampa de comprar. Visitad las protectoras que tengáis cerca y hablad entre todos sobre lo que supondría tener un nuevo compañero en casa. ¡Hay muchos animales que desean ser adoptados!
- Regalar a los demás. Nos llenamos de regalos y disfrutamos de la Navidad rodeados de productos, grandes comidas y luces de colores, pero hay muchos niños y familias que no lo vivirán así, sino todo lo contrario. La Navidad es un buen momento -aunque lo podemos hacer todo el año- para colaborar en un causa justa y aprovechar este momento para explicar a los niños que hay realidades absolutamente dramáticas, a las que no tenemos que dar la espalda. Unicef, Amnistia Internacional, Alboan o la Fundación Vicente Ferrer son ONG con las que podemos colaborar para poner nuestro granito de arena y construir juntos un mundo más justo y ético.